La Periodista, Coach y creadora digital, Valentina Feres, es una mujer que se guía de las conexiones, las mismas que le han permitido vivir diversas experiencias ayudándola en su crecimiento personal, ella es la fundadora de The Dream Project. Valentina nos comenta que dejó hace muy poco Chile, radica en Barcelona hace un año y medio, un cambio que ha sumado en su trayectoria profesional y personal y comparte esas vivencias que han marcado su camino.
Nací en San Fernando que está en la sexta región de
Chile, tuve una infancia afortunadamente muy bonita y agradezco haberla vivido sin
tecnología, jugando con barro, corriendo en el bosque, siempre rodeada de la naturaleza;
pude vivir esa infancia con una sensibilidad especial que hoy en día agradezco.
Desde pequeña fue muy inquieta, solía inventarse
negocios y disfrazarse de diversos personajes, con cada juego poco a poco fue desarrollando su creatividad,
pero entre esos juegos fue descubriendo su verdadera pasión por el canto.
Siempre quise ser cantante hasta el día de hoy, estudié canto, pero por diferentes razones no me dediqué profesionalmente y creo que fue la mejor decisión, aunque es algo que amo y disfruto hacer. Pero es algo muy íntimo y no es algo que comparta mucho en las redes sociales, lo guardo para mí y cuando se presentan las circunstancias puntuales lo muestro. Porque el canto es un arte que sirve para expresar, comunicar y aunque no me haya dedicado al canto hoy en día trabajo con mi voz, ya que muchas personas requieren ser llevadas a una sintonía de meditación importante y eso lo logro con mi voz y las técnicas que aprendí de pequeña, todo ello me sirve muchísimo.
Además, un puntaje, una prueba; no puede medir la capacidad y eso lo tenía claro por la influencia de mis padres, yo estaba segura de que mi capacidad trascendía cualquier prueba, cualquier nota del colegio a la universidad.
Tengo una seguridad desde pequeña, sé que no es tan fácil de llegar a ella y se cultiva a diario y mi mamá me ha impulsado muchísimo.
A pesar de su gran pasión por el canto y su decisión de
estudiarlo, curiosamente algo cambio, al final terminó por decantarse por una profesión
que ha sumado mucho paralelamente a su
pasión.
Hice la prueba, aprobé y me pregunté: ¿esto es lo que yo
quiero? No era lo que yo me había imaginado, no sentí esa conexión; además, la chica que me había escuchado cantar me dijo que me revisara las
cuerdas vocales, y al hacerlo, efectivamente tenía un nódulo, tenía que operarme y no era complicado, pero yo no lo quise hacer.
Recuerdo que, en esos momentos mi madre se encargaba de
postular a diferentes opciones que calzaban conmigo, como el periodismo, las
ciencias políticas y la nutrición.
Yo me encontraba sin saber qué hacer; en ese momento de
indecisión me llamaron de la Universidad de los Andes, de la primera opción que
era periodismo. Era una universidad que siempre había querido conocer, es
preciosa, tiene una alta calidad de profesores, y me dijeron que había ingresado
y fue así que comencé a estudiar periodismo.
Realmente el periodismo me fue gustando con el tiempo, al
principio no me apasionaba, pero aprendí tanto sobre cultura, el poder hablar
con toda la gente, poder de empatizar, aprendí sobre técnicas de comunicación,
de expresión… El ambiente que viví en la universidad fue de alto aprendizaje.
Valentina en ese momento empieza a dar los pasos hacía
una nueva aventura, y comienza a vivir sola en la capital de su país.
Al vivir en Santiago, ella comenzó a vivir una realidad
totalmente distinta, empezó a ver otro mundo y comenzó a relacionarse con los
medios de comunicación, fue una época en la que decidió abrir su blog, donde
tocaba temas relacionados a la moda y así fue ampliando su red de contactos.
Recuerdo que comenzaron a contactarme marcas y agencias
de comunicación para colaborar con ellos, pude asistir a muchos eventos, surgieron
diversas acciones, e iba en el último año de carrera, y podía ver desde la
visión de una agencia de comunicación y desde la visión de un creador de
contenido; fue enriquecedor.
En los eventos me preocupaba en conocer a las personas,
hacer contactos y surgieron amistades muy bonitas que hasta el día de hoy las
tengo. Poco a poco fui profesionalizando mi trabajo en redes sociales, antes no
pensaba en la posibilidad de que me pagaran por hacer algo, todo sea realizaba
por el puro placer de recomendar sin ganar beneficios.
Hasta que un día me llamaron de un evento de cócteles,
una marca muy conocida que elegía al mejor bartender de Chile, y al darme un
presupuesto, me quedé asombrada, a partir de ahí a parte de lo feliz que
estaba, fue una llamada de atención para que pudiera profesionalizar mi trabajo,
entregar mejor contenido, porque si me estaban pagando por esto, en un futuro
podría pasar algo más.
Valentina en esos momentos tenía una tienda online, pero cuando el blog
comenzaba a tener mayor protagonismo, no podía dedicarse a la universidad, a la
tienda y a todo el contenido del blog, razón por la cual traspasó ese negocio. Fue una época en la cual comenzó a darse cuenta de que las personas buscaban información más
rápida y comenzó a trabajar en Instagram, de ello hace cinco años.
Comencé a entender que tenían que ser textos más cortos,
pero con información valiosa, y todo eran tips de cosas relacionadas a la moda.
Nunca compartía algo que era ajeno a mí, todo era mi experiencia y siempre con
mucho respeto.
Con el tiempo empecé a vivir una transformación y fui publicándolo, por ejemplo; con el deporte, porque antes era una persona sedentaria, pero comencé a apasionarme por el deporte, y ahí comencé a publicar sobre estilo de vida, asistir a muchos eventos.
Pero siempre con los pies en la tierra, porque
se suele ver a la moda como algo superficial, pero uno se tiene que vestir todos
los días y el vestuario expresa, comunica y muchas veces no estamos alineados a
eso.
Cuando terminó periodismo quiso dedicarse a la moda, no
deseaba ser una redactora en una revista, pero sentía que podía especializarse
en temas relacionados a la moda como la Asesoría de imagen y el Personal
Shopper.
Me fui con mi mamá a Nueva York a ver dos universidades
que me gustaban y ya tenía planificado hasta donde vivir, ya lo tenía todo
previsto. Al volver a Chile tenía cinco meses para planificar todo y durante
ese tiempo tuve un despertar espiritual con un libro titulado “Cree en ti” de
Rut Nieves; ese fue mi primer acercamiento a mi espiritualidad, ese fue el
momento en el que me replantee todo.
Además, cuando lo compartí en Instagram, al exponerme de
una forma más vulnerable, empecé a recibir comentarios, mensajes de mujeres que
me pedían consejos o solo me comentaban sobre las cosas que estaba subiendo y
todo era sobre crecimiento personal, las mujeres que me seguían comenzaron a
abrirse conmigo y así pude ser más consciente con mi entorno, a dar mayor
atención a las personas que me escribían y notar diversas carencias,
quejas e inconformismos.
Nos confiesa que ha tenido una vida muy positiva a pesar
de haber vividos cosas que le impactaron y eso le permitió ponerse en la
posición de otras personas. Valentina, durante ese tiempo vivió otro momento
que cambió nuevamente la dirección de su camino.
Llegaron a mi mente dos palabras, Coaching y Barcelona, fue
como un flash, lo busqué en Google y lo primero que me salió fue un máster en
la Universidad de Barcelona que comenzaba en tres meses y eran por dos años y
postulé. Recuerdo que me emocioné, era una señal y llamé a mi madre y amigos
cercanos muy emocionada y les dije que había un cambio de planes, que ya no era
Nueva York... me iba a Barcelona.
Valentina tubo tres meses para organizarse, nos cuenta
que su visado salió un día antes de viajar, llegó a Barcelona en compañía de su
madre quien estuvo junto a ella durante los primeros quince días, al día siguiente
de llegar comenzaron sus clases intensivas, para ella fue una experiencia
emocional impactante.
Entre los proyectos más importantes de Valentina Feres, se
encuentra The Dream Project, donde brinda sesiones de coaching, cursos de
desarrollo personal y RRSS.
Lo creé antes de venir a Barcelona. Para mis las redes sociales siempre han sido un placer, solo durante un tiempo me bloquee por el estrés al crear el contenido y por los seguidores, pero luego dije: ¡ya no más!
Con
el estilo de vida que llevaba en Chile, conocí a mucha gente que lo pasaba mal
y me di cuenta de que podía vincular las redes sociales con la esencia y pude
expresarlo, y así nació The Dream Project que se enfoca en el trabajo y
desarrollo profesional de mujeres.
Cuando hablamos sobre las zonas de confort, Valentina nos
comenta que tiene las cosas muy claras, que ella disfruta de su casa que es una
de sus zonas de confort favoritas, pero que a otros niveles siempre va a dejarse
llevar por las conexiones que sienta.
Hay que entender que las cosas maravillosas están fuera
de tu zona de confort, y si uno es capaz de tener claro; ¿cuál es su meta?, ¿cuál
es su propósito? Cualquier barrera, cualquier limitación que tenga queda nulo.
Da miedo, sí, pero simplemente hay algo que es
interesante, que cuando tú dejas de preocuparte comienzas a fluir de una forma
mucho más libre con la vida.
Es bonito dar el paso, aunque asusta, y lo que asusta es
que te encontrarás con algo desconocido. Cuando somos capaces de entender que
tenemos más de cinco sentidos, que hay otras cosas que no podemos ver y que probablemente
hay cosas que no podremos entender, simplemente te entregas y cuando tú te
entregas dejas que las cosas pasen y ni siquiera tienes que esforzarte tanto. Mi
mejor consejo es confía y que afuera siempre hay cosas espectaculares...
Valentina, siente admiración por muchas personas que han
ido coincidiendo en su camino, pero siente una admiración especial por su
madre.
Aunque sea un cliché, mi madre es un referente de generosidad,
de saltar y atreverse con proyectos, es ejemplo de amabilidad y respeto y eso
admiro de la gente que encuentro. Se me han presentado en el camino personas muy
importantes que con simples actos de la vida cotidiana me dan grandes
aprendizajes.
Todas sus experiencias han sumado, pero sobre todo el
dedicarse a lo que tanto le apasiona.
¡Me da plenitud! El despertar y ver un mensaje bonito de
alguien que te dice: ¡Estoy mejor!
¡Uno no sabe el gran impacto que puede causar por más
mínimo que haga y si hay una sola persona a quién le sirva lo que yo hago, es
un regalo para mí! Eso es lo que me motiva para seguir estudiando y
especializándome, para mí, ver la evolución de los demás es como la propia, al
final también crezco.
Nos indica que para ella es importante que las
personas tomen conciencia sobre uno mismo y sobre la salud mental, es
importante que las personas aprendan a cultivar el mundo interior, para
Valentina: “Dentro de cada uno hay un mundo magnífico, mucho más de lo que podamos
creer”.
Hago coaching, soy Terapeuta de Reiki, y todo va de la
mano, mi gran intención es poder llegar a entregar un servicio o una
herramienta integral que consta de tres partes, la primera a nivel interno a
través del coaching, a nivel externo la imagen y la asesoría que me queda por
estudiar y la tercera parte es a nivel energético con el Reiki, y cuando
puedes aplicar estas tres cosas en una persona hay una evolución importante.
En la actualidad, uno de los trabajos de Valentina es como creadora de
contenido, al encontrarse en Barcelona, tiene mayores posibilidades con marcas
internacionales, aunque ella no se dedica al cien por cien a ello, pero suele implicarse en acciones con marcas que se encuentran alineadas con sus valores.
Valentina es una creativa que tiene las cosas claras
y que fluye mucho. Ella nos comenta que la testarudez es algo que le gustaría cambiar, porque
sabe que según qué situaciones puede pasarle factura. Es una mujer que valora en gran medida sus momentos…
Yo, necesito mi espacio, mi tranquilidad, tengo la suerte de vivir sola, amo la soledad, porque tengo mis momentos de reflexión, para meditar, hacer deporte, hacer cosas que conectan conmigo.
Además, tengo mi lugar que está
a una hora y media de Barcelona, es un lugar que se encuentra en medio de una
montaña y está rodeada de naturaleza.
Hace muy poco ha publicado un Workbook llamado “Tu vida
de buena a grandiosa” un libro que es una guía práctica con más de 60
ejercicios para el crecimiento personal.
Es algo que siento que es bueno para completar o para
adentrarte al mundo de la espiritualidad y estoy dando mis pasos para la
segunda parte.
Valentina Feres es una creativa que inspira, y por ello
nos interesa saber: ¿cuál es su esencia?
Soy una persona muy consciente, amo inspirarme de la vida
misma donde fluyen mucha creatividad. Mi esencia es la pasión por lo que hago y
la seguridad de que todo saldrá bien y la libertad que para mí es importante.
Es un honor coincidir con mujeres que transmiten paz, que buscan sumar en cada paso que dan en la vida. Valentina Feres es una creativa que impulsa a ver más allá de lo que somos y potenciar todas nuestras capacidades. Ella es parte de nuestros referentes.
Fotografías cedidas por Valentina Feres.