Cuando viaje a… Bordeaux ¡La bella durmiente de Francia! ¿Descubrimos esta ciudad a sorbos de su buen vino?

  Redacción. Aurora Ubiña.


Bordeaux, o en castellano, Burdeos, una ciudad que me gustaría especialmente ir a visitar. Me encantaría realizar una romántica excursión por sus viñedos, probar su delicioso vino de nombre homónimo en algún castillo del lugar, recorrer la ciudad entera, e ir descubriendo poco a poco sus muchos secretos y atractivos que tiene esta ciudad.

Como te he avanzado en el título de este artículo no he viajado todavía. Me encantaría hacerlo. Y si me has ido leyendo en algún artículo y me conoces un poquito, sabes que una de las cosas que más me encanta del mundo, además de viajar, es planificar el viaje antes de ir. 

Así que, ¿me acompañas en esta planificación por Burdeos?

Burdeos, además de dar nombre a sus vinos, también lo hace con una de las mejores salsas de carne creadas, la salsa bordelesa.

Vinos deliciosos ¡cómo no! Burdeos es sinónimo de buen vino. Los tintos de Burdeos son sencillamente insuperables. 

Un lugar no tan obvio, ni tan conocido como París o Cannes en Francia. Y cuenta con buenos restaurantes con mariscos y pescados frescos de la bahía de Arcachón. Es perfecto para un fin de semana largo. 

¿Te gusta la carne de buey poco hecha acompañada de los mejores tintos del mundo? ¿Te gusta curiosear por los mercados buscando delicias? ¿Probar las ostras de la bahía? 

Entonces Burdeos puede ser tu destino ideal. Sigue leyendo…

Antiguamente Burdeos eran edificios ennegrecidos por el hollín y almacenes en su mayoría junto al río Garona, hace tiempo que esa parte está derruida y dejó pasar la luz a toda la ciudad, y quizás por ese motivo llaman a Burdeos “la bella durmiente de Francia”, como una vieja y olvidada acuarela que cubierta de suciedad y mugre ahora luce limpia y resplandeciente. 

Creo que necesitaríamos un coche de alquiler, para disfrutar de todo lo que esta ciudad y alrededores propone. 

Para los viajes y escapadas a ciudades, me gusta encontrar un alojamiento con buen restaurante en el centro de cada ciudad, donde no haya que coger taxis y moverse mucho, sin lujos, algo práctico. 

Mi recomendación para alojarse si fuera a Burdeos sería, La Tupina, el primer día para hacer check in, ya lo tienes todo en uno, es importante nada más llegar, no tener que hacer grandes desplazamientos para comer bien. Tengo tantas ganas de probar la comida de este lugar, que no veo el momento de ir a esta ciudad. El estilo de cocinar en este hotel-restaurante con grasa de pato, con carbón y leña, es puro Burdeos, … pollo asado, pichones, paté con rábanos, patatas fritas en grasa de pato, …  todo acompañado con un suave burdeos. 

Después de hacer el check in, lo primero que haría sería ir a almorzar a un restaurante que tengo muchas ganas de probar. 

Restaurante Le Coq Sauvage, “el gallo salvaje”, recomiendan probar un almuerzo bucólico en el puerto recreativo de Cavernes-Saint Loubès. En su carta hay delicias como camembert al horno, pechuga de pato, ternera, costillas de cordero, confit de pato, reconozco que no sabría que elegir, lo pediría todo.

El pequeño puerto que está situado al lado del restaurante, situado a orillas del Dordoña, está a menos de un cuarto de hora de Burdeos, estoy convencida que será un lugar pintoresco y encantador, para pasear por él. 

Siguiente parada, una visita y degustación en un Château o castillo. 

Vino Bordeaux

¿Se llama el vino por la ciudad, o la ciudad por el vino? ¿Qué fue antes? 

Château de Reignac, está a unos treinta minutos de Burdeos. Querría conocer los viñedos con una vista guiada, descubrir la historia del lugar y de este vino, el cómo se realiza todo el proceso de la elaboración de su vino, donde crían el vino, sus barricas. Y la mejor parte de la visita la cata del vino, y saborearlo, objetivamente, por su puesto.

Finalizado el primer día, nos podemos ir a descansar.

En el segundo día por Burdeos ¿Conocemos un poco la ciudad?

Desde 2007, la mitad de la ciudad de Burdeos es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.

Un paseo antes de desayunar, a primera hora de la mañana, por los arcos del famoso puente de Napoleón, forma parte de la magia de visitar Burdeos. Hay un arco en cada letra de su nombre ¿crees que es vanidad o solo coincidencia? 

Comenzaría el día desayunando en un lugar especial. Hay que darse caprichos de vez en cuando. 

Nos acercaremos a un edificio, el cuál normalmente lo utilizarías para otro fin, hoy te propongo que vayas a desayunar a él. 

Frente al Gran Hotel de Burdeos, se encuentra La Ópera. Y allí será nuestra siguiente localización. 

La ópera de Burdeos, aquí cuando vienes a este edificio, no necesariamente tienes que venir a ver ópera. Te invito a que vayas a desayunar, como te había avanzado anteriormente. 

Desayuno teatral con el Chef Phillippe Etchebest. Restaurante la cuarta pared. Ese nombre viene de un muro imaginario, que utilizan en teatro, para que los actores no se asusten y piensen que el telón no se ha levantado, o que no actúan para nadie. 

La siguiente parada podría ser el barrio de Saint Pierre, y la iglesia homónima que da nombre al barrio.

Después podríamos ir al río Garona, y realizar una actividad. 

Salida en canoa, para tener unas vistas únicas y magníficas del Garona y de Burdeos. Conocer la ciudad desde el agua te da otra perspectiva de la ciudad y una hermosa manera de conocer la misma. 

El puente de Piedra, Bordeaux

El puente de Piedra fue construido por encargo de Napoleón Bonaparte, curiosamente está construido sobre madera, y es llamado puente de piedra, curioso, ¡verdad!

Después del paseo en canoa…. Hay que descubrir Burdeos desde la ciudad.

Visita guiada y anécdotas históricas de la ciudad, en las callejuelas del viejo Burdeos, ¿te apetece?

Descubrir el Burdeos medieval, tiene que ser impactante. Descubrir la historia de monumentos como los siguientes…

Puerta Grosse Cloche, Bordeaux

Puerta Grosse Cloche, La gran campana, la puerta de San Eloy, el monumento favorito de residentes y visitantes. Y poder observar el resto de la doble muralla, que fue una hazaña técnica para su época. El pueblo de Burdeos quería mostrar su poder.

Catedral de San Andrés, Bordeaux

También la Catedral de San Andrés, entre otros… habrá que descubrirlo en la visita, para no romper toda la magia. 

Otros lugares de interés que visitar en esta ciudad, …

Barrio de Chartons, antiguamente tenía una fama pésima, pero de un tiempo a esta parte todo el mundo quiere vivir en esta zona, así que habrá que visitarlo.

Iglesia Saint-Louis des Chartrons, tiene el órgano más preciado de la región de Aquitania, y hay conciertos durante todo el año. No hay que perderse su interior y sus vitrales de colores. 

Halle des Chartrons, recinto para eventos en Burdeos, como exposiciones, eventos… un edificio magnífico que no hay que dejar pasar de largo. Antiguamente fue un mercado durante la Revolución en el corazón del barrio homónimo, sobre el antiguo convento de las Carmelitas. 

Marché des Chartons, la cita gourmet que uno no puede perderse. Todos los domingos se reúnen más de setenta puestos en los muelles de Chartons para dar a saborear los mejores productos y especialidades de Burdeos, y no solo hablo de comida ¡yo no me lo perdería!

Burdeos es un lugar agradable para pasear en busca de algo delicioso, ¡toma nota de los siguientes restaurantes!

Le Petite Commerce, y probar su filete de pescado de corvina. 

Restaurante L’Entrecote, un filete con patatas fritas, parece que siempre hay cola, buena señal, debe de tener mucho éxito. 

Restaurante Garopapilles, he oído hablar mucho de este restaurante, pequeño, moderno y con una cocina basada en el sabor, raciones pequeñas, aunque jugando con las texturas y sabores como dicen que lo hacen, quizás merezca la pena el capricho. 

Le Marché des Capucins, está justo en el centro de Burdeos, el mercado de los frailes capuchinos italianos, con su famoso café, llamado así por sus hábitos marrones. Es curioso como adaptamos las cosas de la vida. Es el mercado más grande de la ciudad. Los mercados no son solo para hacer la compra diaria sino también para degustar productos frescos. Es fantástico para adquirir lo que no puedes conseguir tan fácilmente en el mercado de tu ciudad. 

¿Te apetece un café?

Le café Utopía, en pleno centro de Burdeos, en la plaza de Camille Julian, sería el sitio perfecto para ese café. Está ubicado en el recinto de una antigua iglesia del siglo XV, es muy conocido allí, así que es una parada obligatoria. Es un café-cine conocido por su programación.

Podríamos despedir Burdeos con una imagen curiosa. 

Place de la Bourse, Bordeaux

Place de la Bourse, para admirar una parte imperdible de la ciudad, se puede admirar el reflejo de los edificios gracias al espejo de agua, fantasía creada por el ingeniero Jean-Max Lorca, es el mayor del mundo, son tres mil cuatrocientos cincuenta metros cuadrados. 

Fuente de las tres Gracias, también en la Place de la Bourse, esta fuente tiene de peculiar que su agua es roja, simula que están sirviendo vino Burdeos. Está claro que en esta ciudad el protagonista es el vino, ¡lógico! Con ocho mil quinientas bodegas que lo producen. 

Puede que no te guste los lugares que elijo tanto para visitar como para comer, es un riesgo que asumo, siempre te voy a recomendar lo que me gusta, o lo que creo que me gusta, se trata de comida local, buen vino, en este caso también, y lugares que creo que te harán sonreír.

En mis artículos de viajes, no te voy a recomendar vuelos baratos, y sobre los restaurantes y hoteles siempre hay un poco de todos los precios, porque al final cada uno sabe marcar su bolsillo, en mis artículos trato de transmitir impresiones, intento crear la imagen desde un punto de vista particular, en concreto de la comida y la bebida, puesto que me considero una comensal entusiasta, ¡adoro la comida! ¡Disfruto comiendo!

Siempre que voy a un lugar, voy por la comida, no te lo voy a negar y trato de construir un sentimiento de añoranza ¿te pasa lo mismo?

¡Te espero en el próximo! ¡No falles!




Redactora. Aurora Ubiña
Fotografía portada. Borja López

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