ELEGANCE




Pululando entre tantas imágenes de mujeres que irradiaban elegancia, me vino a la memoria el nombre Audrey Kathleen Ruston
Conocida por todos como Audrey Hepburn.

Confieso que su personaje de Sabrina, me enterneció, pero me fascinó descubrir a Holly Golightly  en Breakfast at Tiffany's, aquel musical me enamoro, esa soltura y la forma de ver la vida y llevar el día como si fuera el único, con una sonrisa y mucho desparpajo, fue sin lugar a duda, el personaje que me conquisto. 

Siempre destacó como una mujer que tenía un porte y elegancia innata, claro como no tenerlas si durante parte de su niñez, estudio ballet con Sonia Gaskell y en Londres prosiguió sus estudios con Marie Rambert. Estas maestras fueron forjando en ella, esa esencia que irradiaba cuando su presencia llenaba el escenario.

Podemos incluirla dentro de las pocas actrices que gano un Grammy, un Tony, un Emmy y el tan añorado Oscar… Pero su fuerza y esa visión detrás de tantas luces se vieron reflejadas en su participación en equipos de apoyo a los más necesitados y por ello fue considerada como Embajadora de Buena Voluntad UNICEF.

Definitivamente es un ejemplo no solo de buen estilo y elegancia, también de fuerza de voluntad y de lucha constante.










Mono: Massimo Dutti
Zapatos: Martinelli

Model: Alba Alegret
Photographer: Karina Casquero

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