Madrid respira moda, pero es en EGO, la plataforma de Mercedes-Benz Fashion Week Madrid dedicada al talento emergente, donde se percibe con mayor intensidad la energía creativa que marcará el mañana. Un desfile de nombres y universos estéticos que, lejos de seguir patrones establecidos, apuestan por discursos propios, intensos y absolutamente personales.
En esta edición, la diversidad narrativa ha sido el verdadero lujo: desde el reciclaje elevado a arte, hasta la exploración de la identidad, el abismo onírico o la sensualidad del streetwear, cada colección ha sido un manifiesto.
Aleš Hnátek – Wardrobe 3
Con una mirada atenta a lo cotidiano y un espíritu cercano al Arte Povera, Hnátek transforma materiales desechados en piezas exquisitas. Su colección “Wardrobe 3” reafirma que la frugalidad y la artesanía no son limitaciones, sino motores de innovación. Cada prenda es un ejercicio de poesía material: ponible, precisa, pero cargada de reflexión estética.
Antonio Acuario – Momento II
El diseñador abre en canal su biografía emocional para ofrecer una propuesta vulnerable y poderosa. “Momento II” oscila entre lo complejo y lo minimal, entre capas y transparencias que evocan protección y siluetas desnudas que rozan lo confesional. Es un manifiesto de libertad: aquello que se escondió en el pasado se convierte en bandera estilística.
Antonio Del Canto – Vertige
Delirante, hipnótica y profundamente sensorial, “Vertige” convierte la pasarela en un territorio onírico. Entre gasas, sedas y tafetanes, los cuerpos parecen flotar en un limbo surrealista. Prendas como recuerdos borrosos envuelven al espectador en un viaje entre vigilia y sueño, revelando la belleza de lo inestable y lo fragmentado.
Asier Quintana – Crisis. The journey of the decadent and tormented mind
Con un pie en la historia y otro en la contemporaneidad, Asier revisita los códigos del menswear del Siglo de Oro español bajo la lupa crítica del presente. La opulencia barroca dialoga con la sobriedad moderna, en una propuesta que, como en Orlando de Virginia Woolf, cuestiona el tiempo, el género y la identidad.
Dimoni Studio – Cop4cab4na
La calle, el fútbol y el verano se encuentran en una colección sexy, experimental y urbana. Camisetas, vaqueros y bañadores mutan con cortes arriesgados, drapeados y referencias deportivas reinterpretadas con descaro. “Cop4cab4na” eleva el streetwear a territorio identitario.
EMEERREE – Dressing Room
Convertir el acto íntimo de vestirse en discurso. Ese es el eje de “Dressing Room”, una colección donde la sastrería se deforma, se abrocha, se ata y se desata en diálogo con el cuerpo. La lencería se lleva por fuera, reivindicando que lo privado puede ser político, visible y bello.
Guillermo Décimo – In tempo
La alta costura en clave musical. Cada puntada como una nota, cada prenda como una partitura. Con “In tempo”, Guillermo Décimo defiende la atemporalidad de la artesanía y convierte sus 18 looks en obras de arte que cuentan historias tanto en su exterior como en sus interiores ocultos.
Skinsfromtheinsideofmymouth – Debut
Una oda a la juventud y sus contradicciones frente a la tecnología. Negro sobre negro, denim lavado, materiales técnicos y volúmenes industriales componen una colección de gran escala. Un debut visceral y con garra, que muestra cómo lo personal puede convertirse en un relato cultural contemporáneo.
SLV FRR – Over
De la inundación al renacimiento, “Over” explora el crecimiento más allá de los límites. Minimalismo de los 90 mezclado con indie sleaze, oversize contra efecto segunda piel, fiesta y cama difuminadas en un mismo gesto. La marca redefine lo íntimo desde una atmósfera etérea y sensual.
Studio Cumbre – The Ancient Dark / Edit 07
Cumbre cierra el círculo con serenidad y profundidad. Fibras naturales, tonos neutros y artesanía en clave de refugio contemporáneo. Edition 07 es calma hecha moda, una respuesta a la incertidumbre global que rescata lo esencial: prendas que sostienen, protegen y permanecen.
El veredicto
EGO se confirma como la incubadora más vibrante de la moda española: un espacio donde los diseñadores emergentes se atreven a desnudar su imaginario, cuestionar tradiciones y reinventar códigos. En esta jornada, la pasarela se convirtió en un espejo de lo que significa crear hoy: entre vulnerabilidad y resistencia, entre historia y futuro, entre lo íntimo y lo colectivo.
Madrid, una vez más, no solo presentó moda. Presentó visión, discurso y emoción.
Fotografías. MBFWMadrid