Nacido en República Dominicana en mayo de 1967, Lewis Amarante, proviene de una familia, a la cual
denomina; “un popurrí de nacionalidades”.
Es considerado como uno de los mejores maquilladores, su infinidad de
trabajos son su mayor carta de presentación y actualmente es el maquillador oficial
de la firma Max Factor España.
Él nos ha permitido conocer más detalles del camino que ha transitado para alcanzar sus sueños y nos acerca a ese lado tan humano que nos sorprende gratamente.
Mi infancia fue tranquila y feliz, en el seno de una familia tradicional, católica y poco más… Siempre de pequeño te quejas, pero cuando vas creciendo y vas comparando lo que ha sido tu vida, valoras muchas cosas y pienso que he sido afortunado, de tener la familia que tengo y la niñez que tuve.
Somos una familia unida y hacemos todo lo posible por reencontrarnos y hacer cosas juntos. Suele suceder que en la adolescencia, en principio te fastidia un poco, tienes tus planes, quieres despegar, pero con el paso de los años aprecias más esa compañía.
Vivió su infancia en República Dominicana y parte de su vida en Estados Unidos. Y pesar del tiempo y las distancias Lewis se encuentra en el descubrimiento de las cualidades de su país.
Había mucha gente que decía que conocía muchas zonas de República Dominicana y yo no y por eso hago el ejercicio de ir eventualmente y conocer lugares de la isla, aunque me entristece un poco, porque ha cambiado muchísimo.
Ahora Santo Domingo es una ciudad con un tráfico infernal, me parecía que la gente era diferente en mi infancia, dentro de lo que cabe encuentro gente amable, confiada pero no es como antes…
Yo creo que esto pasa en todas partes, la actitud más cercana de los vecinos, se conserva en ciudades pequeñas.
Él nos ha permitido conocer más detalles del camino que ha transitado para alcanzar sus sueños y nos acerca a ese lado tan humano que nos sorprende gratamente.
Mi infancia fue tranquila y feliz, en el seno de una familia tradicional, católica y poco más… Siempre de pequeño te quejas, pero cuando vas creciendo y vas comparando lo que ha sido tu vida, valoras muchas cosas y pienso que he sido afortunado, de tener la familia que tengo y la niñez que tuve.
Somos una familia unida y hacemos todo lo posible por reencontrarnos y hacer cosas juntos. Suele suceder que en la adolescencia, en principio te fastidia un poco, tienes tus planes, quieres despegar, pero con el paso de los años aprecias más esa compañía.
Vivió su infancia en República Dominicana y parte de su vida en Estados Unidos. Y pesar del tiempo y las distancias Lewis se encuentra en el descubrimiento de las cualidades de su país.
Había mucha gente que decía que conocía muchas zonas de República Dominicana y yo no y por eso hago el ejercicio de ir eventualmente y conocer lugares de la isla, aunque me entristece un poco, porque ha cambiado muchísimo.
Ahora Santo Domingo es una ciudad con un tráfico infernal, me parecía que la gente era diferente en mi infancia, dentro de lo que cabe encuentro gente amable, confiada pero no es como antes…
Yo creo que esto pasa en todas partes, la actitud más cercana de los vecinos, se conserva en ciudades pequeñas.
Como todo niño, siempre soñaba con diversas
profesiones que quería ejercer de mayor, como el ser policía, bombero o
veterinario.
Y en su infancia contó con la presencia de su madre, quien lo guío hacia el camino del arte, la música y la pintura; detalles que le permitieron vivir experiencias inolvidables, pero sin dejar de lado una de sus pasiones.
Recuerdo que con siete años vi mi primera ópera; es más recuerdo que mi primer ballet fue Los Solistas de Bolshoi y mi primera ópera fue Madame Butterfly… ¡Me engancho el teatro!
En una película hay efectos y en el teatro la magia pasa frente a tus ojos y… ¡Me encantó! Yo quería ser actor, hice algunas cosas en el colegio, pero por cosas de la vida nunca cuajo.
Pero existe algo que siempre me ha entusiasmado y es la aeronáutica, colecciono modelos de aviones a escala, monto maquetas de aviones, estudié tráfico aéreo y me habría encantado ser piloto comercial.
Y en su infancia contó con la presencia de su madre, quien lo guío hacia el camino del arte, la música y la pintura; detalles que le permitieron vivir experiencias inolvidables, pero sin dejar de lado una de sus pasiones.
Recuerdo que con siete años vi mi primera ópera; es más recuerdo que mi primer ballet fue Los Solistas de Bolshoi y mi primera ópera fue Madame Butterfly… ¡Me engancho el teatro!
En una película hay efectos y en el teatro la magia pasa frente a tus ojos y… ¡Me encantó! Yo quería ser actor, hice algunas cosas en el colegio, pero por cosas de la vida nunca cuajo.
Pero existe algo que siempre me ha entusiasmado y es la aeronáutica, colecciono modelos de aviones a escala, monto maquetas de aviones, estudié tráfico aéreo y me habría encantado ser piloto comercial.
Lo del maquillaje para Lewis fue una
vocación tardía, él comenzó profesionalmente con treinta y dos años.
Estudió arquitectura, diseño y bellas artes, fue diseñador para algunas
firmas y trabajó en publicidad; pero estas profesiones lo fueron encaminando a lo que
realmente le llenaba como persona y como profesional.
Estuve trabajando como publicista en el departamento creativo de una empresa francesa hasta los treinta y dos años y ya era un trabajo que no me motivaba.
Teniendo en cuenta que parte de tu vida te lo pasas trabajando; para mí trabajar solamente por dinero en algo que no te llena, era como prostituirme y para mí prostituirse no es solo vender tu cuerpo por dinero, es hacer cualquier cosa que no quieras hacer, por dinero.
Entonces en el momento que te toca levantarte para ir a trabajar y ya no encuentras una motivación para hacerlo… ¡Es mejor dejarlo!
Me fui planteando todas las posibilidades que tenía, como la pintura y volver a la universidad que ya no era factible; en diseño ya estuve trabajando y cuando trabajas para firmas comerciales, tu creatividad la castran y son cosas que no te llenan tampoco y fui descartando muchas de ellas y pensé: ¿Porqué no aplico las técnicas de bellas artes en un rostro y aprendo algo de cosmetología y cuidado de la piel y pruebo con el maquillaje?. Me di un año de plazo y si no funcionaba volvería a publicidad y aquí estamos, veinte años después…
Cuando comenzó a armar su equipo de maquillaje, lo componían marcas como Maybelline, Bourjois, M.AC, siempre buscaba marcas que tuvieran calidad y fueran asequibles.
Él comenzó a firmar para Mac Cosmetics, realizó colaboraciones con Dior en el lanzamiento del perfume J´Adore, comenzó a participar en desfiles internacionales como el de Alexander McQueen, Diesel. Trabajo como Director de Maquillaje y Peluquería en la pasarela Circuit de Barcelona dentro de la Barcelona Fashion Week. Pero todo cambio cuando Max Factor llegó a España.
Recuerdo que por una portada que hice en la revista NEO2, me llamaron de Chanel y me ofrecieron un contrato con la firma. También trabajé en un evento de Paulina Río, donde salían jóvenes diseñadores y era patrocinado por L’Oreal.
Armando Pinedo, me insistía para irme con L’Oreal con Maybelline y al final me uní al grupo L’Oreal y me gustaba el equipo, con ellos estuve dos años y en el 2007 me llamaron de Max Factor, y querían entrevistarme y me entusiasmo mucho.
Además de que Max factor es la leyenda viva del maquillaje, es la marca de maquillaje que más números uno, tiene de lanzamientos.
Estuve trabajando como publicista en el departamento creativo de una empresa francesa hasta los treinta y dos años y ya era un trabajo que no me motivaba.
Teniendo en cuenta que parte de tu vida te lo pasas trabajando; para mí trabajar solamente por dinero en algo que no te llena, era como prostituirme y para mí prostituirse no es solo vender tu cuerpo por dinero, es hacer cualquier cosa que no quieras hacer, por dinero.
Entonces en el momento que te toca levantarte para ir a trabajar y ya no encuentras una motivación para hacerlo… ¡Es mejor dejarlo!
Me fui planteando todas las posibilidades que tenía, como la pintura y volver a la universidad que ya no era factible; en diseño ya estuve trabajando y cuando trabajas para firmas comerciales, tu creatividad la castran y son cosas que no te llenan tampoco y fui descartando muchas de ellas y pensé: ¿Porqué no aplico las técnicas de bellas artes en un rostro y aprendo algo de cosmetología y cuidado de la piel y pruebo con el maquillaje?. Me di un año de plazo y si no funcionaba volvería a publicidad y aquí estamos, veinte años después…
Cuando comenzó a armar su equipo de maquillaje, lo componían marcas como Maybelline, Bourjois, M.AC, siempre buscaba marcas que tuvieran calidad y fueran asequibles.
Él comenzó a firmar para Mac Cosmetics, realizó colaboraciones con Dior en el lanzamiento del perfume J´Adore, comenzó a participar en desfiles internacionales como el de Alexander McQueen, Diesel. Trabajo como Director de Maquillaje y Peluquería en la pasarela Circuit de Barcelona dentro de la Barcelona Fashion Week. Pero todo cambio cuando Max Factor llegó a España.
Recuerdo que por una portada que hice en la revista NEO2, me llamaron de Chanel y me ofrecieron un contrato con la firma. También trabajé en un evento de Paulina Río, donde salían jóvenes diseñadores y era patrocinado por L’Oreal.
Armando Pinedo, me insistía para irme con L’Oreal con Maybelline y al final me uní al grupo L’Oreal y me gustaba el equipo, con ellos estuve dos años y en el 2007 me llamaron de Max Factor, y querían entrevistarme y me entusiasmo mucho.
Además de que Max factor es la leyenda viva del maquillaje, es la marca de maquillaje que más números uno, tiene de lanzamientos.
Reconoce que con las otras marcas ha estado bien y la vida le ha dado codazos para
salir de su zona de confort, eso le ha motivado a experimentar y aventurarse a
hacer más cosas.
Hay que animarse a dar saltos, a cambiar cosas de tu vida, porque lo más triste es llegar a una edad y decir ¿Y si yo hubiese…? y si no sale, al menos lo has intentado.
Yo estoy en un momento que quiero cambiar cosas, no sé a dónde me llevarán, pero lo intentaré.
No olvidemos que existe un mundo de posibilidades para experimentar, el estar vinculado a una marca es algo muy bueno, porque te da esa comodidad y esa seguridad de estar arropado por un grupo, pero en cierta forma, te cortan las alas.
Yo ahora sigo con Max factor, pero veremos que pasa en el futuro…
Hay que animarse a dar saltos, a cambiar cosas de tu vida, porque lo más triste es llegar a una edad y decir ¿Y si yo hubiese…? y si no sale, al menos lo has intentado.
Yo estoy en un momento que quiero cambiar cosas, no sé a dónde me llevarán, pero lo intentaré.
No olvidemos que existe un mundo de posibilidades para experimentar, el estar vinculado a una marca es algo muy bueno, porque te da esa comodidad y esa seguridad de estar arropado por un grupo, pero en cierta forma, te cortan las alas.
Yo ahora sigo con Max factor, pero veremos que pasa en el futuro…
Dentro de sus hobbies, se encuentra visitar museos, ruinas, pero lo que realmente le ayuda a desconectar, es cuando está en casa con sus engreidos, cuando aprovecha a ver a la gente que forma parte de su vida.
Uno de los detalles que nos ha fascinado de este talentoso profesional, es el amor que siente por la vida, por la naturaleza, por los seres vivos.
Siempre tengo la casa llena de gente… ¡Pero es una gozada! Porque pienso que si no tienes gente que te quiera; ¡No tienes nada!
La gente más pobre del mundo, es la gente que no tiene a nadie alrededor, no la que no tiene dinero. Y los amigos y la familia son como las plantas, hay que cuidarlas y darles cariño y darles tiempo.
Soy amante de los animales, amante de la naturaleza, de la vida, tengo carpas japonesas que las rescate, una serpiente que me dejaron para cuidar y nunca vinieron a por él; que se llama Ricardo José; mis tres chihuahuas, Roberto, Antonio y Paco, pensar que los iban a sacrificar y Tito es mi labrador que lo rescate en Barcelona, que se encontraba en malas condiciones y el perro de mi hija; Isidro, que lo traje para casa… ¡Ellos son mis bebes!
Lewis es consciente de todo lo que representa y que la vida ha sido un constante aprendizaje y una evolución; sabe que todo
cuanto consiga tendrá que ser por su propio esfuerzo, que nunca dejará de
mostrarse como es; que el tiempo le ha enseñado que es vital ser siempre uno mismo, en todos los momentos de la vida.
Soy una persona que intentar ser feliz, feliz con lo que hace; entendí que ¡La felicidad no es un destino; es un trayecto!
Intento ser feliz en mi vida personal y profesional y hago todo lo posible porque sea así.
Yo hago mi pequeño universo. Tengo defectos e intento ir mejorando. Quiero ser feliz y quiero conseguir mis metas en la vida.
Antes era muy tímido y no decía lo que pensaba, sentía miedo de herir u ofender; pero con los años tengo menos filtros, porque a la larga esos filtros generan malos entendidos. Yo digo las cosas sin ser ofensivo y sin causar dolor; lo que intento es vivir de la mejor manera, porque al final del día duermo conmigo; porque luego mi cerebro me pasa factura, lo que llamamos consciencia; y si alguna vez he fastidiado a alguien ha sido de una forma inconsciente e involuntaria.
Soy una persona que intentar ser feliz, feliz con lo que hace; entendí que ¡La felicidad no es un destino; es un trayecto!
Intento ser feliz en mi vida personal y profesional y hago todo lo posible porque sea así.
Yo hago mi pequeño universo. Tengo defectos e intento ir mejorando. Quiero ser feliz y quiero conseguir mis metas en la vida.
Antes era muy tímido y no decía lo que pensaba, sentía miedo de herir u ofender; pero con los años tengo menos filtros, porque a la larga esos filtros generan malos entendidos. Yo digo las cosas sin ser ofensivo y sin causar dolor; lo que intento es vivir de la mejor manera, porque al final del día duermo conmigo; porque luego mi cerebro me pasa factura, lo que llamamos consciencia; y si alguna vez he fastidiado a alguien ha sido de una forma inconsciente e involuntaria.
Maria Medeiros - Revista NEO2 |
Es una persona que le da mucho valor al tiempo y es
de los que creen que es necesario cometer errores pero para aprender de ellos y no volver a cometerlos aunque sea complicado,
pero que todo radica en el intentarlo.
Y que actualmente existen otros detalles que lo mueven y hace que su día a día no sea algo monótono.
Antes era muy paciente, ahora soy mucho más impaciente. Cuando era más joven decía; ¡Tengo todo el tiempo por adelante! Y al ser mayor quieres hacer tantas cosas y ya soy impaciente y eso me hace chillar.
Me suelo cabrear conmigo mismo y de vez en cuando hay que chillar y si no sacas lo que tienes ahí, te enfermas, no se puede estar en una línea plana, tienes que tener tus picos de cabreo y eso no te hace ni mejor ni peor persona, solo te hace humano.
Y que actualmente existen otros detalles que lo mueven y hace que su día a día no sea algo monótono.
Antes era muy paciente, ahora soy mucho más impaciente. Cuando era más joven decía; ¡Tengo todo el tiempo por adelante! Y al ser mayor quieres hacer tantas cosas y ya soy impaciente y eso me hace chillar.
Me suelo cabrear conmigo mismo y de vez en cuando hay que chillar y si no sacas lo que tienes ahí, te enfermas, no se puede estar en una línea plana, tienes que tener tus picos de cabreo y eso no te hace ni mejor ni peor persona, solo te hace humano.
Lewis ha colaborado con revistas como Elle, Harper´s Bazaar, Neo2, entre otras, ha realizado diversas campañas con Custo Barcelona, Carolina Herrera, Cartier, Pertegaz y muchas más que han sumado experiencias.
Reconoce que existen profesionales que lo inspiran y que uno de los trabajos
que lo motivaron, fue una portada de Vogue donde aparecía Penélope Cruz,
quien había sido maquillada por Pablo Iglesias.
Yo quería hacer eso, yo quería ser como ese chico y quería trabajar en la agencia en la cual él trabajaba; por eso arme mi book y me presente ahí y me cogieron.
Admiro a Jorge de la Garza, Jordi Fontanar, siempre me voy a dejar a alguien, pero existe mucha gente.
Yo creo que no hay malos profesionales, aunque yo haría muchas cosas de otra forma y lo que siempre le digo a la gente; que si haces catálogos de Venca o Carrefour, no significa que eres menos que nadie, por no hacer catálogos de Dior o estar publicando en Vogue; tienen que recordar que están cumpliendo una función para un cliente y eres bueno porque estas cumpliendo con una necesidad.
No quiere decir que sea mejor ni peor que nadie, porque todos tienen un espacio, todos cubrimos funciones.
Yo quería hacer eso, yo quería ser como ese chico y quería trabajar en la agencia en la cual él trabajaba; por eso arme mi book y me presente ahí y me cogieron.
Admiro a Jorge de la Garza, Jordi Fontanar, siempre me voy a dejar a alguien, pero existe mucha gente.
Yo creo que no hay malos profesionales, aunque yo haría muchas cosas de otra forma y lo que siempre le digo a la gente; que si haces catálogos de Venca o Carrefour, no significa que eres menos que nadie, por no hacer catálogos de Dior o estar publicando en Vogue; tienen que recordar que están cumpliendo una función para un cliente y eres bueno porque estas cumpliendo con una necesidad.
No quiere decir que sea mejor ni peor que nadie, porque todos tienen un espacio, todos cubrimos funciones.
Marie Dalgar |
Workshop Experience |
Sus compromisos con Max Factor, son las
diversas actividades televisivas, en festivales como la que se realiza en San Sebastian,
las presentaciones de productos, es el portavoz en España. Es una persona que
con todo lo que ha vivido, tiene muy claro que si realiza algo en su vida,
tiene que llenarlo en todos los aspectos.
¡El proyecto es intentar seguir vivo, intentar ser feliz! El hecho de hacer una carrera, no tiene que convertirse en una cruz que tengas que cargar siempre, hay mucha vida por delante.
Si estudiaste derecho o psicología y luego no te gusta; piensa en lo que realmente te remueve las tripas, te hace latir el corazón; entonces puedes dejarlo y ponerte a lo que realmente te emociona.
Pasamos mucho tiempo de nuestra vida trabajando, entonces que ese tiempo sea un tiempo de disfrute, no de tortura y tenemos que tener claro que nunca es tarde para empezar.
Cuando yo deje la publicidad, trabajando en una multinacional francesa, la gente me decía que estaba loco… Pero es necesario arriesgarse y que nadie se equivoque por ti, ¡Equivócate tú solo, cáete, levántate y hazlo!
Recuerda que las cosas van poco a poco, nada a corto plazo y disfruta lo que haces porque si no, nada tiene sentido...
Lewis ha tenido la oportunidad de viajar y conocer lugares que lo han enamorado e inspirado, como Kenia, pero anhela conocer África; ha visitado diversos países latinos y nos ilusiona saber que a pesar de no haber llegado a Perú, ha disfrutado de delicias peruanas.
Perú se resiste, pero tengo muchas ganas de visitarlo; porque me encanta la artesanía, su comida; la chicha morada y la carapulcra ¡Que bueno!
¡El proyecto es intentar seguir vivo, intentar ser feliz! El hecho de hacer una carrera, no tiene que convertirse en una cruz que tengas que cargar siempre, hay mucha vida por delante.
Si estudiaste derecho o psicología y luego no te gusta; piensa en lo que realmente te remueve las tripas, te hace latir el corazón; entonces puedes dejarlo y ponerte a lo que realmente te emociona.
Pasamos mucho tiempo de nuestra vida trabajando, entonces que ese tiempo sea un tiempo de disfrute, no de tortura y tenemos que tener claro que nunca es tarde para empezar.
Cuando yo deje la publicidad, trabajando en una multinacional francesa, la gente me decía que estaba loco… Pero es necesario arriesgarse y que nadie se equivoque por ti, ¡Equivócate tú solo, cáete, levántate y hazlo!
Recuerda que las cosas van poco a poco, nada a corto plazo y disfruta lo que haces porque si no, nada tiene sentido...
Lewis ha tenido la oportunidad de viajar y conocer lugares que lo han enamorado e inspirado, como Kenia, pero anhela conocer África; ha visitado diversos países latinos y nos ilusiona saber que a pesar de no haber llegado a Perú, ha disfrutado de delicias peruanas.
Perú se resiste, pero tengo muchas ganas de visitarlo; porque me encanta la artesanía, su comida; la chicha morada y la carapulcra ¡Que bueno!
Esto lo conozco gracias a un señor peruano que era ceramista y que trabajaba con mi hermana. Y espero poder viajar en algún momento, cuando algún proyecto se concrete y como decía Chabuca Granda: ¡Déjame que te cuente limeña!.
Dentro de las anécdotas que ha vivido, nos comenta que en el aeropuerto de Miami, él estaba a punto de perder el vuelo y al correr, se le cayo todo el maquillaje, que terminó desparramado por el suelo y al subir al avión, todos aplaudían y él no sabia donde meterse de la vergüenza.
Su carrera le ha brindado diversas vivencias y mil historias que hacen que sus días tengan un ritmo distinto…
Es lo bonito que tiene este trabajo, no sabes lo que te va a
deparar; trabajas con equipos nuevos, en lugares nuevos, con lo cual tu rutina
de trabajo, aunque maquilles todos los días cambia. Lo que mantiene la
chispa encendida es eso.
Tener una especie de reto cada día y lo que yo siempre intento hacer es cambiar
mi equipo periódicamente, porque si te acomodas a productos determinados,
repites, lo complicado después de veinte años…. ¡Es seguir sorprendiendo con
lo que haces!
Y es un gusto seguir sorprendiéndonos con todo el trabajo que realiza, con su
implicación con diversas organizaciones, con su perspectiva de vida, con esa energía y carisma que proyecta.
Para nosotras es un verdadero honor conocer más de la filosofía de vida, del gran Lewis Amarente.Fotografías cedidas por Lewis Amarante.
Entrevista realizada por Karina Casquero Ch.