Una de las razones; de las muchas por las
cuales me fascina Barcelona, son sus calles, esas calles que por más que las suelo
transitar en varias oportunidades, siempre terminan por sorprenderme, por
enamorarme.
Pero mi amor hacia a esas calles fue más
intenso, cuando llegue a ver el video de My Inmortal de Evanescence, hace muchísimos
años y a kilómetros de distancia…
Esa melodía e imágenes hicieron que
deseara fervientemente poder transitar estas calles llenas de encanto, poder embriagarme
del misterio de sus colores, del perfume de su historia.
Cuando quiero desconectar de todo, según el
día que tenga, recorro esas callejuelas, llegando a la Plaza de Sant Felip
Neri, ubicada en el Barrio Gótico, en donde se grabó una de las escenas que más
ternura me causan, por todo lo que implicaba el momento, solo pensar en ello,
hace que las notas del piano y la voz tan intensa de Amy Lee, retumben en mis
pensamientos, e inmediatamente busco la melodía y como si fuera un imán, me
atrae arrastrándome hacia ese lugar…
Lo curioso es que a pesar de haber estado
la primera vez en aquella plaza; gracias a una amiga que me llevo a conocerla,
no la había identificado del todo; pero cuando volvieron las notas, aquellas melodías,
hicieron que viera aquella silueta dando vueltas en el contorno de la fuente
mientras esos niños corrían… No pude evitarlo y tuve que volver…
Es una de las canciones que han marcado
parte de mi vida, creo que en un momento todos nos sentimos perdidos, pero
siempre hay alguien que está ahí, a tu lado, y te ayuda a ver lo bello de todo
cuanto tienes que vivir, y aunque las letras de esta canción no dibujaban del
todo lo vivido, me fascinaba la melodía y la intensidad de la vocalista…
Y ahora viviendo tan cerca, es inevitable que vuelva a
transitar por estas calles que nunca dejan de sorprenderme y donde muchas veces
nos volvemos a reencontrar con nosotros mismos…
Model: Tamara Sanabria
Fotógrafa - Editora: Karina Casquero