Dicen que los mejores resultados se obtienen con perseverancia y mucha paciencia, dando el valor real a los segundos, minutos y horas. Dando el valor que se merece al paso de nuestro tiempo.
Podemos ser capaces de esperar, de quedarnos quietos en algún
punto de nuestra existencia, de intentar paralizar el transitar de las agujas
del reloj, pero somos conscientes que a la larga, todo cuanto podamos vivir,
merece la pena sea cual sean los resultados, porque esos finales han logrado un cambio
importante en nosotros, por la simple idea de transformarnos en nuestro
crecimiento a través de las experiencias.
El tiempo, nuestro tiempo toma formas inesperadas, es capaz de
llamar nuestra atención y la de los demás, de causar emociones, de alterarnos o
calmarnos, es fuente de nuestra locura y de nuestras decisiones, ya sean estas
correctas o no.
Pero os habéis puesto a pensar… ¿Qué el tiempo nos invita a
competir contra él, constantemente?... en
carreras infinitas, en retos que exigen mas de nuestro "Yo", cerebral, físico y
emocional. Y que nosotros aprendemos a amoldarnos a cada cambio; desarrollando
habilidades que nos permitan ser más de lo que nos hemos planteado alguna vez.
Nuestro tiempo, aquel que nos pertenece y que paso a paso,
instante tras instante, nos permite aprender del pasado, apreciar el presente y
anhelar el futuro desde otras perspectivas.
Es aquel que al final y al cabo, es simplemente nuestro por sobre todas
las cosas…
“El tiempo pasa muy lento para los que esperan,
muy rápido para los que temen,
muy largo para los que sufren,
muy corto para los que gozan,
pero para quienes aman,
El tiempo es Eternidad.”
William Shakespeare.
Designer: José Rivero
Model: Dayhana Arboleda Orlas
Make Up: Andrea Soriano
Photographer: Karina Casquero