Redacción. Silvia Minguella
Sí, sí, como lees; a disfrutar en el proceso de cada día,
tratar de evolucionar y ser mejor persona que el día anterior. Quizás no te lo
has planteado antes, pero sobre todo como mujeres, la clave para acceder a
nuestro poder personal y ese empoderamiento del que tanto se habla hoy en día,
reside en estar tan conectadas con nuestra alma y nuestro interior que nos
damos el permiso para sentir placer en cualquier aspecto y ámbito de la vida.
¡Ahí reside la esencia del poder femenino! Con todo lo
que anda pasando por el mundo últimamente el hablar de placer puede rechinar o
sonar como un imposible, pero es que es precisamente eso lo que necesitamos
para florecer y brillar con autenticidad. Irónicamente, aunque en esencia somos
seres que brillamos con el placer, estamos tan condicionadas socialmente a
tener que dar todo de nosotras y más para ser y sentirnos válidas, útiles y
superwomen, que inconscientemente rechazamos por inercia todo aquello que nos
permite disfrutar con placer de la vida.
¿Cuántas veces te han dicho “que guapa te ves hoy”, “me
gusta tu vestido”, “necesitas ayuda?” o te han ofrecido un brownie y
automáticamente tu respuesta ha sido responder con otro halago, información de
donde es el vestido o un ¡No! rotundo a la ayuda y al brownie por las calorías
(¡aunque te mueres de ganas!).
Con estas respuestas y actitudes que tenemos
automatizadas porque nos han educado a deber ser siempre quién da más y está al
servicio del resto, nos dejamos en último lugar sin permitirnos disfrutar de
cosas tan pequeñas que pueden cambiar nuestro día como es un halago o un dulce
caído del cielo.
Anastasia Shuraeva |
LA ENERGÍA SEXUAL
Llevándolo al siguiente nivel, debemos empezar a entender
también que tanto el placer como la sexualidad son 2 energías conectadas entre
sí y muy potentes, imprescindibles para nuestro bienestar, además de
sentimiento de plenitud/abundancia.
Por un lado, el placer en sí mismo se relaciona con la
sensualidad y la belleza que podemos encontrar en los pequeños detalles que
pueden hacerse grandes: desde el primer café de la mañana, el olor de ese café
o del perfume que te pones; en la sensación de la ropa recién lavada y su
textura suave en tu piel o viendo un atardecer antes de volver a casa.
Todas estas cosas activan nuestra red sensorial a través
de los 5 sentidos y cuando estamos presentes nos activan nuestra energía sexual
al conectar con un placer interno dentro de nosotras que, a su vez, nos abre a
la abundancia al inspirarnos y permitirnos sentir placer sin culpa, simplemente
disfrutar del momento porque sí, porque es nuestra esencia.
La energía sexual, es la energía de la creatividad,
gracias a la cual nos surge el fuego interno para poder crear desde una
manualidad, una comida deliciosa, un negocio exitoso y en el caso de las
mujeres: ¡Vida!
Por eso es importante ser conscientes y conocedoras de
nosotras mismas, saber lo que nos apaga vs lo que nos invita a adentrarnos en
nuestro mundo interior de sensaciones que inspiran e impulsan a crear desde el
alma. Cuando logramos conectar con esta sensación en lugar de esperar que un
agente externo nos diga lo que debemos hacer, es cuando podemos aspirar a ser
libres y plenas.
Obviamente el re-conectar con esta energía que nos
permite vivir con placer y abundancia requiere de un trabajo personal y
constancia para el que debemos estar dispuestas y preparadas a corregirnos a
nosotras mismas.
Bia Sousa |
Algunos tips y pequeños ejercicios que os invitó a
practicar juntas este mes:
- Levántate cada día 30 min antes para que puedas disfrutar degustando tu café matutino en casa sin prisas.
- Al ducharte siente el jabón con el que te limpias el cuerpo, el olor y la sensación de la esponja en tu piel.
- Prémiate con un masaje de espalda.
- Cuando alguien te halague en lugar de cualquier otra respuesta, da las Gracias.
Cuéntanos cómo te vas sintiendo a medida que practicas
estas sugerencias ¡Feliz mes de las flores!
Con esto, os invito a que en el día de hoy y, si os
animáis durante toda la semana también, vayáis conectando con esta energía para
aprender conscientemente y aceptar qué te da placer. ¿Lo sabes?